Cuando te casaste o cuando tuviste un hijo tuviste que acudir al Registro Civil para inscribir ambos actos. Sin embargo, existen muchos otros casos en los que es necesario pasar por este registro. De hecho, en este organismo se deben apuntar todos los hechos que atañen a tu estado civil. Pero, ¿por qué es necesario anotar este tipo de circunstancias?
En nuestro país existen varios registros civiles donde deben incluirse los cambios antes mencionados, pero aunque son algo muy común, todavía hay muchas personas que no tienen claro para qué sirven y por qué es necesario inscribir hechos que les afectan.
Por eso, en este artículo vamos a explicar qué es un Registro Civil y cuáles son los actos que deben ser inscritos en él.
Registro Civil: ¿qué es?
El Registro Civil es una institución pública creada en 1870, en la que se recogen todo tipo de actos referentes al estado civil de las personas, como los nacimientos, defunciones, matrimonios, etc. Pero también incluyen todos los hechos que la Ley ordena que deben ser inscritos. Este organismo público depende del Ministerio de Justicia y es competencia del Estado, pero es la Dirección General de los Registros y del Notariado quien se encarga de todos sus asuntos.
La función principal de los registros civiles es que una persona pueda demostrar el estado civil que afirma tener ante terceros, ya sean otras personas físicas o personas jurídicas. Por ejemplo, si una persona dice estar casada, el Registro Civil habrá anotado el matrimonio en su Libro de Familia en su momento, y esto es prueba suficiente.
Los registros civiles son públicos, por lo cual cualquier persona puede pedir información sobre lo que está anotado en ellos, siempre que no haya ninguna norma que lo impida o haya alguna restricción, como suele ocurrir con las filiaciones, las rectificaciones de sexo o las causas que provocaron la privación de la patria potestad, por ejemplo. A petición de la persona, el registro le mostrará la información solicitada, o emitirá el certificado correspondiente.
En nuestro país existen varios Registros Civiles:
- Los Registros Municipales ordinarios y delegados, para las anotaciones habituales.
- Los Registros Consulares, para españoles que estén en el extranjero.
- El Registro Civil Central, para todo el país.
- El Registro Civil de la Familia Real, exclusivo para sus miembros.
¿Qué hechos hay que inscribir en el Registro Civil?
Como venimos diciendo, en un Registro Civil se debe anotar todo hecho o acto que tenga relación con el estado civil de una persona, pero también hay ciertos casos en que el Ordenamiento exige que se inscriban ciertos hechos.
Debe ser inscrito en el Registro Civil:
- Los nacimientos.
- La filiación (quienes son los padres).
- El nombre y apellidos de las personas y los posibles cambios sobre ellos.
- Las emancipaciones y habilitaciones de edad.
- Las modificaciones de la capacidad de las personas por orden judicial o las declaradas en concurso, quiebra o suspensión de pagos.
- Las declaraciones de ausencia o fallecimientos.
- La nacionalidad y vecindad.
- La patria potestad, tutela y demás representaciones recogidas en la Ley.
- Los matrimonios.
- Las defunciones.
Antiguamente, para registrar cualquier hecho era necesario acudir personalmente al Registro Civil de tu localidad. Por suerte, en la actualidad, muchos de estos trámites ya se pueden hacer de manera telemática, por ejemplo a través del portal del www.registrocivildealbacete.com, donde es posible solicitar distintos certificados, pedir citas previas o consultar dónde se encuentran los distintos registros civiles del municipio.
Como puedes comprobar, el Registro Civil es un organismo imprescindible, sea del tipo de sea, ya que al fin y al cabo sirve para dar fe de todos los hechos en él anotado. Es decir, es un pilar clave para garantizar la seguridad jurídica en nuestro Ordenamiento.
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